Desde que Noé le dió ventaja a la primera paloma post-diluviana ha sido un no parar...estas ratas con patas están desplazando a los gorriones de las grandes ciudades. Quien pensó en la paloma como el elemento representante de la paz, la verdad se quedó fuera de onda. Transmisoras de enfermedades, son una auténtica plaga. Ya que son representantes de la paz, propongo que las metamos a todas en unas cuantas jaulas y las soltemos en Irak, Israel, Líbano, Palestina, etc. para que de una vez trabajen y no estén viviendo de las rentas bíblicas como en los últimos tres mil años. ¡Se acabó el vivir de gorra, pequeñas ratas aladas!

"Upsssssssss, creo que nos han descubierto..."